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DEMOCRACIA PLANETARIA Construyamos de inmediato en el mundo verdaderas Democracias, verdaderas Repúblicas. Comprometámonos con todos los rincones del Planeta para que sean despedidos todos los eternos titulares de los todavía falsos-públicos empleos de los distintos Países. Momentos como estos nos dicen que no podemos actuar solos sino que necesitamos unirnos supranacionalmente no solo para oponernos sino precisamente para ganar no solo en casa sino también sobre las mismas organizaciones supranacionales (culturales, económicas, financieras, políticas, científicas) que mandan el mundo, anulando incluso la unánime voluntad local. Con el objetivo de hacer finalmente democráticos también esas: participadas estrictamente pro tempore por tantos humanos como sea posible y ya no poseídas perpetuamente por una restringida aristocracia y casta. Exigimos que se establezcan Bancos de Empleos Públicos en todas partes: en los que los ciudadanos (naturalmente competentes, idóneos, preparados) puedan sucederse en ellos por un plazo fijo. Nada será lo mismo otra vez. Ya nadie podrá lastimarnos ni lastimar a nadie ni a nada. Los gobiernos, la política, duran y importan poco. En vez, los arribistas, los burócratas, los empleados de por vida, son sumamente dañinos porque son eternos y están siempre dispuestos (aferrados como están a su posición fija y con un espasmódico deseo de carrera y poder crecientes) a obedecer ciegamente, previniendo cualquier bien hecho, a cualquier camarilla, élite, lobby y mafia locale y mundiale. Si queremos hacer que la Tierra evolucione como nunca ha sucedido en los últimos tres cuartos de siglo, todo lo que necesitamos es enfocarnos en este único fin. No perdamos más tiempo persiguiendo una vana cotidianidad, no quedemos nos estancados donde se detuvieron los grandes pensadores del pasado que mantienen bloqueadas a las miríadas de humanos que equivocadamente aún se dejan guiar por ellos. Día tras día nos mantenemos enfocados y constantemente confirmamos nuestra plena voluntad de que cualquier empleado de por vida en las publicas centralidades del mundo sea despedido definitivamente. ¡Vamos a despedirlos ahora! ¡Echarlamolos a todos! Debe convertirse en un mantra repetido para todo el Planeta. Tenemos desde hace tiempo un precioso Indicador Único de Democracia que sólo nos queda descubrir y utilizar metódicamente: si no hay renovación periódica en un cargo o empleo público, no hay Democracia. No son los ciudadanos los que deciden su destino. ¡Si trabajamos duro, lo logramos! Los negros lo hicieron, con la esclavitud, las mujeres, con el voto. ¿Por qué no habríamos de lograr, todos juntos, emanciparnos de organizaciones centrales que han permanecido tiranas, por lo tanto déspotas, por haber mantenido el empleo de por vida, el mercenarismo? Somos nosotros, legítimos dueños de la Res Publica, que tenemos nos seguir unos a otros en su gestión. ¡Y así es exactamente como entenderemos que en el fondo no importa tanto quién gobierna sino quién está alrededor de quién gobierna! ¡Gracias y buen trabajo! Danilo D'Antonio, mayorista de ideas Inteligencia Artificial Biológica en el Laboratorio de Eudemonia De acuerdo con la teoría de la patente social (que hace avanzar a la humanidad tal como lo hizo la patente industrial con la tecnología) cada proyecto de Laboratorio tiene un precio. Información sobre su dominio Internet. Abrimos enseguida el Banco de los Empleos Públicos! La Repubblica: accesible, dinámica, fluida, osmótica, participada, vivida! ¡Feliz! Copyright & ServiceMark Laboratorio Eudemonia Alcuni diritti concessi A R M O N I C A R O T A Z I O N E S O C I A L E |